La Corte Suprema de Reino Unido dictaminó que legalmente sólo se puede considerar a una persona como “mujer” por el sexo biológico. En un fallo inédito y alarmante, el Reino Unido dejará de reconocer a las mujeres trans como mujeres en las leyes de equidad del país, establecidas en 2010.
El fallo establece que una mujer trangénero con un Certificado de Reconocimiento de Género (GRC, por sus siglas en inglés) que la identifica como mujer ya no será considerada de tal forma. La desición únanime establece que el concepto de sexo es binario y que sólo es posible la existencia de un “hombre y una mujer biologica”.
Esta sentencia ha generado controversia y preocupación entre activistas de la comunidad trans, pues el fallo marca un retroceso en los derechos de las personas trans y las políticas de género.
Este atentado contra de los derechos de las personas trans surge después de que en en enero Donald Trump emitiera una orden ejecutiva firmada por la Casa Blanca titulada "Defendiendo a las Mujeres de la Ideología de Género Extremista y Restaurando la Verdad Biológica en el Gobierno Federal" para defender una “verdad biológica”.
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La creencia de la “verdad biológica” es un retroceso en la construcción social del género que se utiliza para incrementar las desigualdades y discriminación en contra de las personas trans, pues ignora la diversidad de identidades de género para promover agendas políticas específicas, como documentamos en este texto.
Aunque el vicepresidente de la Corte Suprema, Patrick Hodge, aseguró que las personas trans están protegidas bajo las leyes en contra de la discriminación y aconsejó que el fallo no de debe interpretar como una victoria de un grupo sobre otro, la realidad es que la sentencia es, de raíz, profundamente transfobica, pues la batalla legal inició en Escocia, desde al año 2018 por el grupo de mujeres For Woman Scotland, quienes se oponen a las reformas que permiten a las personas trans cambiar su sexo, de acuerdo con sitio web.
¿Cómo inició el caso?
En 2018, Escocia aprobó la ley parlamentaria de Representación de Género en Juntas Públicas en la que se requería que la mitad de las personas en cargos de juntas directivas del sector público fueran mujeres. Inicialmente la ley incluía a las mujeres trans que contaran con un Certificado de Reconocimiento de Género, sin embargo, el grupo For Woman Scotland se manifestó en contra de la ley en los tribunales.
El grupo argumentó que la inclusión de mujeres trans podría afectar los servicios dirigidos a las mujeres, como albergues de víctimas de abuso, hospitales especializados y actividades deportivas. El FWS llevó el caso a tribunales desde entonces, y en 2022 una jueza del tribunal más alto del país negó los argumentos biologicistas y binarios de sexo, sin embargo, el caso llegó a la Corte Suprema del Reino Unido y falló a su favor.
¿Cuáles fueron las reacciones?
El fallo fue celebrado por el grupo FWS y pos sus simpatizantes, entre quienes se encuentran integrantes de los partidos conservadores del Reino Unido como la líder del Partido Conservador del Reino Unido, Kemi Badenoch y celebridades como JK Rowling, quien desde hace años se ha declarado como una feminista radical transexcluyente (TERF) y escribió en X (antes Twitter):
“Fueron necesarias tres extraordinarias y tenaces mujeres escocesas con un ejército detrás para conseguir que este caso fuera escuchado por la Corte Suprema y, al ganar, protegieron los derechos de las mujeres y las niñas en todo el Reino Unido.”
Por su parte, activistas de la comunidad de mujeres trans han rechazado el fallo y expresado que el panorama para las personas de la diversidad es desolador en el Reino Unido.
“Estoy decepcionada, ningún juez puede decirme quién soy. Si un juez te dice que no eres una mujer, que eres un hombre no cambiaría quién eres o cómo te sientes. Se siente como si siguiéramos los pasos de los Estados Unidos de Trump”, dijo la activista trans Heather Herbert en una entrevista con la cadena de televisión BBC después de la noticia, y explicó que esta era una medida del gobierno para atacar a la comunidad trans y a las minorías del Reino Unido.
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