Un Sistema Nacional de Cuidados en México transformaría la vida de miles de mujeres, incrementando de 37% a 68% las oportunidades para que aquellas de bajos recursos salgan de la pobreza. Esto representaría un avance crucial en la reducción de la desigualdad de género y la pobreza en el país, de acuerdo con un informe del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).

El estudio “Construcción del Sistema Nacional de Cuidados para la movilidad social” revela que la implementación de un Sistema Nacional de Cuidados —compromiso del gobierno de Claudia Sheinbaum— es fundamental para abordar la brecha de género en la participación laboral y la pobreza. Actualmente, las mujeres realizan tres cuartas partes del cuidado no remunerado y enfrentan condiciones precarias en el mercado laboral

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Foto: Cuartoscuro 

En entrevista para La Cadera de Eva, Rocío Espinosa, investigadora del CEEY, señaló que el 89% de la producción de cuidado no remunerada recae en los hogares, y tres cuartas partes en las mujeres, lo que limita su participación laboral especialmente cuando tienen responsabilidades familiares.

"Los cuidados sostienen la vida y representan el 27.4% del PIB, pero la carga recae desproporcionadamente en las mujeres. La participación laboral de las mujeres cae un 10% cuando hay niños pequeños en el hogar, lo que refleja la desigualdad en la distribución de cuidados" (Rocío Espinosa. )

Según cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) tener esposa garantiza 2.9 horas de tiempo libre a los hombres. En contraste tener marido, significa siete horas de trabajo extra para las mujeres.

Es por eso que en 2020, la Cámara de Diputados aprobó la creación del Sistema Nacional de Cuidados, el cual reconocería por primera vez en la historia la responsabilidad del Estado en la atención de las personas adultas mayores, con discapacidad, niños, niñas y adolescentes, para que las labores de cuidado se distribuyeran equitativamente y no solo entre las mujeres, como ha sucedido históricamente.

Este dictamen, que modificaría los artículos 4 y 73 de la Constitución señala que “el Estado promoverá la corresponsabilidad entre hombres y mujeres en el cuidado de quien lo requiera y que deberá ser garantizado acorde a sus necesidades e intereses”.

Pero cuatro años después de esta aprobación, la intención de crear el Sistema Nacional de Cuidados se quedó solo en papel. Su creación es uno de los principales compromisos del actual gobierno.

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Brechas entre mujeres

Las mujeres en México enfrentan desafíos diversos debido a su origen étnico, discapacidad, edad, orientación sexual o condición social. Un Sistema Nacional de Cuidados puede ser un paso hacia la igualdad. Al proporcionar apoyo y recursos para las mujeres más vulnerables, podemos reducir las brechas y promover la inclusión, destaca Rocío Espinosa.

La disponibilidad de centros de cuidado cercanos a los hogares aumenta las posibilidades de que las mujeres salgan de la pobreza. Al contemplar las brechas existentes dentro de las mismas mujeres, este sistema puede ofrecer servicios de cuidado infantil, atención a personas mayores, con discapacidad, y apoyo a las trabajadoras del hogar.

Al respecto, Rocío Espinosa señaló que el Diamante del Cuidado, —un concepto implementando por la Organización Internacional del Trabajo (OIT)— representa cuatro actores clave que deben trabajar juntos para proporcionar cuidados efectivos: hogar, comunidad, Estado y mercado. 

El concepto del diamante del cuidado considera que otros actores además del Estado, el mercado y la familia pueden participar en la prestación de servicios de bienestar a los ciudadanos de un país . 

"La disponibilidad de centros de cuidado cercanos a los hogares puede duplicar las posibilidades de que las mujeres salgan de la pobreza. La corresponsabilidad entre hogares, comunidad, Estado y mercado es clave para garantizar un sistema nacional de cuidados efectivo" (Rocío Espinosa.)

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Financiamiento

¿Cuánto costaría hacer realidad un Sistema Nacional de Cuidados realidad? La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) estima que se requeriría de una inversión pública anual de 481 mil 243 millones de pesos, equivalente a alrededor de 1.4% del PIB.

Esto implica que el gobierno federal tendría que destinar más de 10 veces de los que gasta actualmente para este tema, de acuerdo con las estimaciones del de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). Al respecto, Rocío Espinosa explica que la inversión en servicios de cuidado puede potenciar el crecimiento económico y la participación laboral de las mujeres.

"La incorporación de las mujeres al mercado laboral puede aumentar en un 10% gracias a los servicios de cuidado, lo que tiene un impacto positivo en la economía. El sistema de cuidados no es un costo, sino una oportunidad para generar beneficios económicos y sociales" (Rocío Espinosa. )

¿Qué propone el Sistema Nacional de Cuidados?

  • Aprobar la reforma constitucional y propuestas de leyes para garantizar el derecho al cuidado.
  • Proveer de más y mejores servicios de cuidados, accesibles dentro y fuera del hogar; 
  • Mejorar las condiciones de trabajo de todas las personas cuidadoras, que reciben pago y las que no
  •  Distribuir mejor las labores de cuidado entre la sociedad, el mercado laboral y las instituciones de gobierno;
  • Reconocer la importancia del sector de cuidados como uno de los motores de la movilidad social, así como impulsar su crecimiento a través del gasto público.