Este fin de semana se celebra el Día del Padre en México. Y aunque muchos mensajes estarán dirigidos a felicitar a los “papás presentes” y también a los “luchones”, también es momento de hablar de los otros, los ausentes, los abandónicos, los papás de fin de semana que no cuidan, no sostienen, no alimentan.
Según el Censo de Población y Vivienda 2020 del INEGI, en México hay 45.3 millones de hombres de 15 años o más. De ellos, solo 21.2 millones, es decir, menos de la mitad, son padres que viven con al menos uno de sus hijes. En cambio, en más de 4.1 millones de hogares, el padre está ausente. No por nada en México sigue siendo común la frase “se fue por los cigarros y no volvió”. Muchas familias saben lo que es crecer sin un papá presente.
En La Cadera de Eva decidimos dedicar esta semana a mirar el tema del cuidado desde varios ángulos. Publicamos una investigación que muestra lo lejos que estamos de la corresponsabilidad en esos cuidados y es que entre 2019 y febrero de 2025, el IMSS otorgó solo 20 mil 807 licencias de paternidad, lo que equivale a un promedio de 3 mil 376 permisos al año. Y es que a pesar de que la ley establece cinco días de permiso por nacimiento o adopción, los datos revelan que la mayoría de los padres ni siquiera solicitan ese mínimo.
La paternidad en nuestro país todavía es optativa. Lo demuestra también el hecho de que apenas esta semana la Ciudad de México publicó, por primera vez, su Registro de Deudores Alimentarios, una herramienta de transparencia que expone a mil 547 hombres que incumplen con el pago de la pensión alimenticia.
Con esto, la CDMX se convirtió en la tercera entidad federativa en abrir este listado, después de Coahuila y Oaxaca. La medida forma parte de la Ley Sabina, impulsada por el Frente Nacional contra Deudores Alimentarios y madres autónomas organizadas, que buscan visibilizar una de las violencias más normalizadas: la violencia económica.
Como lo explicó la activista Diana Luz Vázquez en entrevista con La Cadera de Eva hace unos meses, el registro no es una sanción arbitraria, sino una forma de hacer justicia, de poner el cuidado como obligación legal y no como un favor. No se puede hablar de paternidad sin hablar de cuidados. Y no se puede hablar de cuidados sin hablar de género.
Pero este no es solo un debate local. El 16 y 17 de junio, México será examinado por el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW), el principal órgano internacional encargado de supervisar el cumplimiento de los derechos de las mujeres. Ahí, el Estado deberá rendir cuentas sobre sus políticas de igualdad, presupuestos, justicia y atención a la violencia. Y, como contamos también esta semana, los cuidados estarán sobre la mesa.
Aunque el gobierno ha impulsado algunas reformas y programas sociales, México sigue sin contar con un Sistema Nacional de Cuidados que garantice el derecho a cuidar, a ser cuidadas y a no cuidar en condiciones injustas. En este contexto, el próximo 17 de junio estrenaremos un nuevo episodio de El Podcast de Eva. Hablamos con Margarita Garfias, una madre que enfrentó al Estado para conseguir cannabis medicinal para su hijo. Hoy, su lucha es colectiva, por el derecho al cuidado y por la dignidad de quienes cuidan.
Y es que cuidado no es un asunto privado. Es una estructura invisible que nos sostiene. Es trabajo no remunerado, horas de sueño perdidas, trayectos interminables, abandono institucional. Es la razón por la que miles de mujeres en México no pueden estudiar, trabajar, ni salir de una relación violenta. Y sin embargo, sigue fuera del centro de las decisiones políticas.
En La Cadera de Eva creemos que hablar de cuidado es hablar de poder, de derechos, de justicia social. Por eso esta semana publicamos datos, historias y análisis que colocan la lupa donde a veces nadie quiere mirar, en la ausencia de los padres, en la indiferencia del Estado, y en la fuerza de las madres que, aún sin redes ni respaldo, siguen sosteniendo la vida.
Mientras la corresponsabilidad de cuidados siga siendo simbólica, el Día del Padre no podrá ser solo celebración.También debe ser memoria, exigencia y pregunta:
¿Cuántos cuidan de verdad?