Rebelde, incómoda, misteriosa y poderosa, María de los Ángeles Félix Güereña es una de las figuras más importantes de la cultura popular mexicana que encaró al machismo de la época y reivindicó la figura de la musa.
Aunque propio del contexto social, María Félix no escapó de realizar algunos comentarios desafortunados -y hasta clasistas-, aún con ello, sus lecciones y frases ingeniosas para enfrentarse a un mundo que la quería poner en jaque, pasarán a la posteridad y nos recuerdan lo poderosas que podemos ser cuando luchamos por nuestros ideales, levantamos la voz y reconocemos nuestra capacidad de transformar el mundo.
Hablar de María Félix es toda una experiencia llena de misticismo y fantásticas aventuras; rumores que se corren de su belleza, leyendas de reyes que la visitaban para admirarla o el metro de la Ciudad de México como regalo de su esposo el banquero francés, Alexander Berger. Sin importar por dónde se mire, la realidad es que María Félix conquistó territorios a nivel internacional que, en la época postrevolucionaria, parecían imposibles.
Su lucha contra los comentarios edadistas, contra varones que intentaban despojarla de su poder con comentarios sexistas o periodistas que la acosaban inventando rumores de su sexualidad, fueron parte de cotidiana de la historia de la apodada "Doña"; por supuesto, ninguno penetró en su acorazada personalidad y por el contrario, siempre concluía sus crudas respuestas con una invitación para todas las mujeres que la escuchaban: ¡No se dejen!
Por ello, estas son 10 frases de María Félix para recordarte lo poderosa que eres:
En un mundo de hombres como éste, quiero avisarles que tengan cuidado. Ahí viene la revancha de las mujeres, cuando seamos mayoría vamos a mandar, pero para mandar hay que estar informadas, aprender y estar preparadas. Por eso es necesario que la mujer se eduque. Así que mujeres: ¡Abusadas!
Algo que caracterizaba a María Félix era su constante apuesta por el desarrollo del país, sin embargo, consciente de esta necesidad sabía bien que el proceso no iba a llegar hasta que las mujeres formaran parte activa de la sociedad y los “machos violentos”, -como ella los llamaba-, se extinguieran. Esto último es algo que repetía con insistencia, señalando incluso que el primer macho que conoció fue su padre, al igual que muchas mexicanas de la época postrevolucionaria.
Por ello, esta lección de María Félix continúa vigente hasta nuestros días; mantente informada, preparada y rebelde.
- Tenemos que ser más autónomas, más dueñas y señoras de nuestro destino, así podremos hacer más por este país
Similar a la primera frase, La Doña apelaba a una constante revolución donde las mujeres fueran parte activa de la toma de decisión política, cultural y social, sin embargo, comprendía las ataduras patriarcales y el escrutinio social de las mujeres que escapaban a los roles de género, por ello, utiliza una palabra muy poderosa que nunca debemos olvidar: Autonomía.
Palabra que ha sido retomada en la teoría feminista, por ejemplo en “Claves feministas para el poderío y autonomía de las mujeres” de Marcela Lagarde donde aborda la importancia de la autonomía en la vida de las mujeres.
- Protesten, quéjense, no se dejen, prepárense, hagan de su vida lo que ustedes desean y no lo que sus hombres les permitan ser. Amen y háganse amar. No se conformen con poco. Este será de hoy en adelante un país de mujeres. Ahora nos toca.
¿Imaginas qué poderoso es escuchar a una mujer incitar a otras a no depender de sus esposos en los años cuarenta? Esta es una de nuestras frases favoritas y nos recuerda la importancia de conducir la vida desde la libertad, amar y ser amada desde el respeto y jamás conformarse.
- El peor de los males que nos hace perdedoras es el machismo
En la vida de María Félix el machismo siempre fue uno de los discursos que más la hacían exaltar y por ello, recordamos esta frase. A más de 50 años de escucharla hablar de "este mal", su frase continúa presente hasta nuestros días y deja por sentado que la lucha contra el machismo sigue al pie del cañón; una lucha que las mujeres ya no están dispuestas a perder.
- Si una está guapa por dentro naturalmente se refleja y embellece el exterior
Antes de hablar del autocuidado feminista y de la libertad del tiempo, María Félix ya lo practicaba e invitaba a otras a cuidar de ellas mismas, cultivarse, sanar, de dedicarse tiempo y de protegerse.
- No me des consejos, yo puedo cometer errores sola
Una constante en la vida de esta actriz y modelo era cuando otras personas intentaban controlarla, infantilizarla o ponerla en encrucijadas; resultaba incómoda para la sociedad. Por ello, una de sus frases más icónicas aborda la libertad y el derecho de las mujeres a tomar sus propias decisiones.
- Hago un voto de fe y de razón para que las mujeres mexicanas ya no se queden calladas. Para que entiendan que para tener un mejor lugar hay que tener valor. Hay que saber que la verdad es lo único que nos va a salvar y hará mejores personas.
Aunque la figura de María Félix resulta controversial para muchas personas, sus frases persiguen el mismo hilo conductor: Para transformar el país se necesitaba valentía y de mujeres que no estuvieran dispuestas a guardar silencio.
- No le tengo miedo ni a las canas ni a las arrugas, sino a la falta de interés por la vida. No le tengo miedo a que me caigan encima los años, sino a caerme yo misma.
Algo que repetía entre risas María Félix era la manera en que intentaban agredirla o hacerla menos hablando de su aspecto físico durante su vejez, sin embargo, dio cátedra a la prensa cruda y a los roles de género; se sentía cómoda con su cuerpo y envió un mensaje a la sociedad edadista: No hay nada qué temer.
- Estoy hasta arriba de la cabeza de los pendejos y, sobre todo, de los que nos quieren seguir viendo la cara. Y como algunos hombres no se ponen los pantalones, nosotras hoy nos los vamos a poner.
No hay mucho que añadir a esta cita, sólo el recordatorio emancipador de que, si como María Félix también has experimentado el hartazgo, es momento de mirar hacia abajo y saber que los pantalones los traes listos desde siempre y sólo es cuestión de apretarlos bien para salir a enfrentar al mundo; no necesitas de alguien a tu lado para conquistar.
- Yo con el pasado no cuento; siempre vienen cosas nuevas.
Este conteo de frases de María Félix no estaría completo sin una de las más esperanzadoras; frase que vela por un futuro mejor y nos enseña lo necesario que es aprender a soltar el pasado para abrazar las nuevas experiencias, el cambio y la transformación.
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