En el marco del 69 periodo de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW69) en la sede de la Organización de las Naciones Unidas, en Nueva York, se realiza una revisión crucial a 30 años de la adopción de la Plataforma de Acción de Beijing.  

Este acuerdo histórico, surgido de la Cuarta Conferencia Internacional de la Mujer en 1995, estableció 12 ejes de acción para el avance de las mujeres, incluyendo su participación en el ejercicio del poder y la toma de decisiones.

Para analizar el progreso y los desafíos persistentes en materia de paridad política, La Cadera de Eva conversó con María Elena Esparza Guevara, presidenta de Ola Violeta, organización que participa por primera vez en la CSW.

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Foto: Cuartoscuro

Avances y retos

A tres décadas de la implementación de la Declaratoria de Beijing, María Elena Esparza Guevara describe el panorama actual como "agridulce", si bien reconoce avances en la lucha por la igualdad de género, también señala una preocupación ante el posible retroceso que podrían generar agendas conservadoras a nivel mundial.

Al ser consultada sobre los principales avances en la implementación de la Declaración y Plataforma de Beijing en los últimos 30 años, María Elena Esparza Guevara, comenta que sería complejo revisar cada uno de los 12 ejes. Sin embargo, en relación al liderazgo femenino, destaca que, si bien ha habido crecimiento, todavía hay más hombres que mujeres representando estos altos cargos.

La presidenta de Ola Violeta se refirió a datos del Foro Económico Mundial que estiman que se necesitarán 131 años para cerrar la brecha económica global de género, una brecha muy vinculada con la representatividad política de las mujeres

En este sentido, subraya que el hecho de que hasta ahora solo haya 17 jefas de estado a nivel internacional ilustra la magnitud del camino por recorrer para alcanzar la paridad en las posiciones de poder.

María Elena Esparza Guevara también enfatiza cómo las tareas de cuidado no remuneradas, que siguen recayendo principalmente en las mujeres, generan pobreza de tiempo y menor competitividad femenina en diversos ámbitos.

"Para una mujer, pues va a seguir siendo más difícil en la medida en que sigue siendo su obligación asignada social y culturalmente, la atención y el cuidado de todo lo que está en el terreno" (María Elena Esparza Guevara, presidenta de Ola Violeta)

Sus observaciones se alinean con datos recientes de la ONU. Un informe divulgado con motivo de la CSW revela que las mujeres han logrado un progreso limitado en las áreas políticas más influyentes, con solo un 13% como ministras de Defensa o Interior, un 17% como cancilleres y un 16% como ministras de Finanzas.

El informe también indica que, a principios de 2025, los hombres superaban a las mujeres en más del triple en puestos ejecutivos y legislativos. Al respecto, Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres, ha señalado que "treinta años después de la Declaración de Pekín, la promesa de la igualdad de género en el liderazgo político sigue sin cumplirse. El progreso no solo es lento; está retrocediendo".

Al respecto, María Elena Esparza Guevara señala que está edición de la CSW69 ha resaltado la creciente importancia de abordar la brecha digital como un nuevo desafío para la igualdad. Esta falta de acceso y conocimiento tecnológico para las mujeres está siendo planteada desde la ONU en este 2025 como un umbral de desarrollo hacia el futuro.

"Hay un dato que nos señala que las mujeres tienen 21% menos de probabilidades de saber cómo se usan los aparatos digitales que los hombres, sobre todo de nuevo en las regiones más vulnerables de África y de Asia. Y eso pues está implicando que se crea una nueva segregación" (María Elena Esparza Guevara, presidenta de Ola Violeta)

Otra de las preocupaciones de las organizaciones que asisten a la CSW69, es el auge de gobiernos con tendencia ultraconservadora, que están retirando financiamientos a políticas de igualdad e inclusión. Esta situación genera inquietud sobre el futuro de las luchas feministas y el apoyo a las organizaciones de la sociedad civil que trabajan por los derechos de las mujeres.

Nuevos compromisos

Durante la CSW69, se ha reiterado que la agenda de Beijing sigue vigente y se ha destacado la necesidad de transformarla en acciones concretas para lograr la igualdad entre mujeres y hombres. Se ha reconocido que, a pesar de los avances, permanecen obstáculos.

En relación a lo que se espera lograr en esta conferencia, María Elena Esparza Guevara menciona que se renuevan los acuerdos de Beijing, pero con una mirada fresca y actualizada que incorpora la dimensión tecnológica, reconociendo tanto los desafíos como las oportunidades que presenta la inteligencia artificial para la inclusión de las mujeres y las niñas.

Desde su perspectiva como activista mexicana presente en la CSW69, María Elena Esparza destaca la importancia de insistir y señalar los problemas que aquejan a nuestra sociedad en particular, especialmente la violencia machista, el feminicidio y la situación de las mujeres migrantes.

Aunque hasta el momento el gobierno federal no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre los acuerdos y compromisos que asumirá en el marco del 30 aniversario de la Declaración de Beijing, Citlalli Hernández, secretaria de las Mujeres, sostuvo un encuentro bilateral con Sima Bahous, directora Ejecutiva de ONU Mujeres, en el marco de la CSW69

En la reunión Sima Bahous enfatizó que, con su primera presidenta mujer y la primera Secretaría de las Mujeres, se han iniciado cambios significativos en México, con mujeres desempeñando roles de liderazgo clave.

“En el contexto global actual, países como México desempeñan un papel fundamental en la promoción de la igualdad de género, manteniendo el impulso frente a cualquier retroceso que pueda surgir” (Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres)