Una comparativa entre Peso Pluma y la cantante de regional mexicano, Angela Aguilar ha evidenciado el trato diferenciado entre estos dos artistas luego de que Peso Pluma refiriera en su concierto en Argentina cómo el equipo albiceleste había derrotado a México en el mundial de Qatar, produciendo la molestia de la población mexicana.
Todo sucedió cuando el cantante de corridos tumbados apareció al escenario argentino con la playera de la selección albiceleste, lo que emocionó al público para después, producir una ola de aplausos y gritos luego de que Peso Pluma señalara que para él era un orgullo estar "con los campeones".
Posteriormente, refirió que a México le habían “metido la verga", pues Messi es "papá", los ánimos de las personas presentes estaban por los cielos y el mexicano tuvo una gran recepción entre el público argentino por sus comentarios que apelaban al orgullo futbolero.
Por su parte, en México las personas mostraron un serio descontento con el cantante, pues había "traicionado" a su país. Asimismo, muchas personas sacaron a la conversación cómo se había cancelado a Angela Aguilar por un comentario menor que el de Peso Pluma.
Con todo el diálogo producido en redes, muchas personas salieron a su defensa, atajando que no era para tanto, pues es parte de su trabajo elogiar y acoger bien a sus fans de todo el mundo; hasta el momento, Peso Pluma no se ha pronunciado y el tema no ha pasado a mayores. Siendo esto, un buen momento para cuestionar la cancelación: ¿machismo o motivos reales?
Ángela Aguilar: Machismo y misoginia
De unos años a la fecha, Ángela Aguilar se ha convertido en una de las artistas con mayor rechazo por parte de la población mexicana; produce molestia su tono de voz, su ropa, su cuerpo y lo que dice, siendo la violencia mediática una constante en la joven artista.
Toda esta carga de odio se ha recrudecido con sus más recientes declaraciones sobre su bisabuela argentina y su broma relacionada a "tener los ojos achinados", produciendo en el espectro social una serie de burlas por sus comentarios, críticas a su aspecto e incluso, se ha convertido en víctima de amenazas de abuso sexual.
¿De dónde vienen estos discursos de odio?: Del machismo interiorizado que después, escala a misoginia.
Marcela Lagarde explica en su obra "Identidad de Género y Derechos Humanos, la Construcción de las Humanas" que el machismo se alimenta de otras opresiones que podemos encuadrar con Ángela Aguilar. Estas son:
- La cosificación
- La infantilización
- Atemorizar
El machismo es la herramienta sistémica de rechazo contra la cantante, sus acciones y lo que representa; no importa si sus declaraciones resultan favorables o desacertadas, no existe razón sustancial para generar amenazas, la cancelación y el uso de su imagen para producir contenido explícito sin su consentimiento.
Cuando se ejerce esta clase de discursos, entonces, se habla que el machismo escaló a la misoginia; la representación de odio más grande en razón de género. Marcela Lagarde explica que esta clase de acciones daña la vida de las mujeres, sin importar si se trata de algo simbólico.
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La acción de Peso Pluma coloca en el visor cómo funciona el pacto patriarcal y la validación con otros, pues aunque el comentario estuvo orientado en la misma línea que las declaraciones de Ángela Aguilar, la diferencia del castigo social es abismal.
En La Cadera de Eva conversamos con Nelly Lucero Lara Chávez, Comunicóloga, profesora de la UNAM e investigadora del Centro de Investigaciones de Estudios de Género de la UNAM quien explica que la cancelación de mujeres parece una persecución de brujas moderna.
Lee esta entrevista completa aquí.
Desde la perspectiva de la especialista, esta clase de tratos sociales fomentan el acoso masivo y también, crea campañas enormes con el objetivo de eliminarlas del mapa; acciones similares a las que se ejercen contra la cantante como dejar de consumirla, convertir en una mofa sus conciertos y sacar de contexto sus declaraciones, son acciones que deberían ser objeto de reflexión: ¿realmente se odia a una persona por hablar de otro país o se odia por una misoginia interiorizada? No estamos obligades a escucharla, pero sí a cuestionar los discursos violentos.