La Fiscalía francesa solicitó la pena máxima de 20 años de prisión contra Dominique Pelicot por drogar, violar y reclutar a decenas de hombres para abusar sexualmente a su exesposa Gisèle durante una década.

El juicio que se realiza desde septiembre de este año en Aviñón, Francia, entró en su recta final con la solicitud de penas para los 51 acusados. La fiscal Laure Chabaud calificó los actos de Dominique Pelicot como "repugnantes" y destacó que "20 años es a la vez mucho y muy poco", considerando la gravedad de los delitos.

“Es un momento muy emotivo”, señaló Gisèle Pelicot al ingresar a la sala del tribunal.

La mayoría de los acusados, de entre 26 y 74 años de edad, también se enfrentan a hasta 20 años de prisión por violación agravada. Al respecto, la fiscal Chabaud señaló que estos hombres no podían ignorar la ausencia de consentimiento, ni justificarse en un eventual acuerdo de su exmarido.

"En 2024, ya no se puede decir: ‘Ella no dijo nada. Estaba de acuerdo’. Es algo de otra época" (Laure Chabaud, fiscal.)

Mientras que, para Jean-Pierre M., de 63 años, el único acusado que no está siendo juzgado por violar a Gisèle Pelicot, la Fiscalía pidió 17 años de prisión por agredir sexualmente a su propia esposa con los mismos métodos.

Jean-Francois Mayet, otro de los ficales del caso, enfatizó que lo que está en juego en este caso de violación masiva y sumisión química no es solo una condena o absolución, sino un cambio fundamental en las relaciones entre hombres y mujeres.

“Este proceso está sacudiendo nuestra sociedad en nuestras relaciones mutuas, en las relaciones más íntimas entre los seres humanos. La sociedad tiene que comprender nuestras necesidades, nuestras emociones, nuestros deseos y sobre todo tener en cuenta los de los demás” ( Jean-Francois Mayet, fiscal.)

La vergüenza cambió de bando

Gisèle Pelicot, de 72 años, se ha convertido en un icono feminista en la lucha de las mujeres contra los abusos sexuales y la sumisión química. Su valentía al insistir que las audiencias se celebraran en público para cambiar la narrativa de la cultura de la violación que culpa a las víctimas y no a los agresores.

Esta resiliencia no ha pasado inadvertida, el fiscal Jean-Francois Mayet elogió el “coraje” y la “dignidad” de Gisele Pelicot y le agradeció que permitiera que en las audiencias se mostraran algunas de las aproximadamente 20 mil fotografías y vídeos tomados sin su conocimiento por Dominique Pelicot.

“Tenía razón, señora: las últimas semanas han demostrado la importancia de mostrar esto, para que la vergüenza cambie de bando” (Jean-Francois Mayet, fiscal.)

La decisión que tomó Gisèle de haber hecho un juicio abierto al público y enseñarle al mundo las atrocidades que sufrió en su casa, a manos de la persona en la que más confiaba, tendrá repercusiones positivas para miles de víctimas, aseguró el psicólogo forense Tadgh Tobin. 

“Sus implicaciones sobre cómo pensamos acerca de la violencia sexual y quién la experimenta, durarán mucho más”, escribió Tobin en un artículo de The Conversation.

Además, la presidenta de la Cámara de Diputados, Karol Cariola, alabó la "valentía y dignidad" de Gisèle y destacó que su caso es un ejemplo de la lucha contra la violencia hacia las mujeres.

El veredicto se espera para el 20 de diciembre, y las defensas presentarán sus alegatos finales hasta el 13 de diciembre. La primera será Béatrice Zavarro, abogada de Dominique Pelicot, quien aseguró “está destrozado”.

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