Desde la histórica anulación del fallo Roe vs. Wade por la Corte Suprema en 2022, que protegía el derecho al aborto en Estados Unidos, las restricciones al aborto en el país han generado una crisis de salud pública con impactos desproporcionados en la población latina.
De las 30 millones de mujeres latinas en el país, un 42% reside en estados con leyes restrictivas sobre la interrupción del embarazo. Esta situación ha provocado que las mujeres latinas se vean particularmente afectadas por el aumento de las barreras geográficas y la limitada disponibilidad de citas para acceder a servicios de aborto legal, de acuerdo con un estudio realizado por el National Bureau of Economic Research (NBER).
La investigación, titulada "The road not taken: how driving distance and appointment availability shape the effects of abortion bans" (El camino no tomado: cómo la distancia de manejo y la disponibilidad de citas dan forma a los efectos de las prohibiciones de aborto), analiza los efectos a nivel de condado tras la derogación de Roe vs. Wade, revelando que las prohibiciones totales de aborto por sí solas conducen a un aumento del 1% en los nacimientos, incluso en condados donde la distancia y la disponibilidad de citas permanecen sin cambios.
Las y los investigadores sugieren que este incremento se debe a un "efecto escalofriante", posiblemente originado por la incertidumbre legal, la desinformación o los obstáculos logísticos, factores que operan independientemente de las barreras físicas.
Un dato particularmente alarmante es que los mayores aumentos en nacimientos se observan entre las mujeres negras e hispanas, las personas sin un título universitario y las mujeres solteras. Esto sugiere que las mujeres latinas enfrentan obstáculos adicionales o se ven afectadas de manera desproporcionada por estas restricciones.
Actualmente, al menos 13 estados prohíben el aborto completamente, incluso en casos de violación o incesto, según datos del Instituto Guttmacher. Esta ofensiva legislativa tiene un impacto desproporcionado en mujeres de comunidades racializadas, migrantes y de bajos recursos, quienes enfrentan mayores barreras para acceder a servicios médicos.
Viajes interestatales
El estudio del NBER destaca que los efectos de las prohibiciones crecen sustancialmente con las dificultades de viaje. En condados donde la clínica de aborto más cercana estaba a 50 millas (80 kilómetros) antes de la derogación de Roe vs. Wade, una prohibición total incrementa los nacimientos en un 2.8% cuando la distancia aumenta a 300 millas (483 kilómetros).
La investigación también encontró que la limitada disponibilidad de citas en las ciudades de destino amplifica aún más estos efectos, resultando en un aumento adicional de 0.4 puntos porcentuales en los nacimientos.
Las restricciones en ciertos estados han impulsado los "viajes interestatales" para acceder a servicios de salud reproductiva en lugares donde el aborto sigue siendo legal.
Sin embargo, como señala Alejandra Soto, Directora de Comunicaciones de Planned Parenthood, no todas las personas gestantes tienen las condiciones económicas o personales para trasladarse a otro estado. Esta realidad impacta especialmente a la población latina, particularmente a aquellas que viven en zonas rurales, tienen bajos ingresos o son indocumentadas, quienes enfrentan mayores dificultades para superar estas barreras.
Foto: Cuartoscuro
El papel de la telemedicina
El reportaje "Mi cuerpo, mi decisión" documentó que la derogación del fallo Roe vs. Wade ha generado un aumento del 56% en la mortalidad materna y el cierre de clínicas de salud sexual y reproductiva, lo que limita el acceso a servicios básicos. Ante este panorama, la telemedicina emerge como una alternativa vital al ofrecer aborto con medicamentos por correo.
Sin embargo, un hallazgo preocupante del estudio del NBER es que a pesar de la expansión de recursos logísticos, financieros y de telemedicina para apoyar el acceso al aborto, los investigadores no encontraron evidencia de que los efectos de las prohibiciones hayan disminuido con el tiempo. Esto subraya la persistente y crucial influencia de las barreras geográficas, y por extensión, el impacto continuo en comunidades como la latina.
La incertidumbre legal también genera una encrucijada para los profesionales de la salud, quienes temen ser objeto de demandas al proporcionar atención médica adecuada en un contexto legal incierto.
Este estudio también pone de manifiesto cómo las restricciones al aborto no solo limitan el acceso a un procedimiento médico, sino que también tienen consecuencias demográficas significativas, afectando de manera especial a grupos vulnerables como las mujeres latinas en Estados Unidos. La investigación subraya la necesidad de considerar las barreras geográficas y la disponibilidad de recursos al analizar el impacto real de las políticas de aborto.
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