Este 2023 en La Cadera de Eva trabajamos en grandes reportajes con perspectiva de género que visibilizaron diferentes realidades que habitan mujeres, personas con discapacidad, personas que pertenecen a la comunidad LGBTQ+, entre otros sectores de la población. Gracias a una de estas investigaciones obtuvimos un Premio Nacional de Periodismo.

En esta nota te guiaremos por un recuento de las reportajes con perspectiva de género de La Cadera de Eva que no puedes dejar de leer este 2023. Trabajamos temas cómo lo invisibilizadas que están las mujeres con adicciones y el problema que esto genera cuando necesitan un tratamiento; la necesidad de replantearse la forma en la que se lleva a cabo el Pride; cómo viven la menstruación las mujeres en situación de calle, entre otras temáticas. 

1. Las mujeres con adicciones sí existimos: soy madre, hija, amiga y compañera

¿Cómo se vive una adicción en México siendo mujer? Las mujeres con adicciones en el país se enfrentan a la falta de información con perspectiva de género, espacios de contención a los que acuden más hombres que mujeres y por ende están fuertemente masculinizados, acoso sexual cuando terminan las sesiones, entre otras cosas. 

Del 2011 al 2017 el consumo de drogas en mujeres de 11 a 17 años aumentó un 207%, de acuerdo con el Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, sin embargo, no hay estudios sobre el género y las adicciones. 

Se sabe que existe una "alta incidencia de abuso sexual que viven las mujeres en adicción y cómo estar expuestas a grupos masculinizados y violentos puede generar ansiedad entre las mujeres en estado de vulnerabilidad que atraviesan violencia doméstica y/o sexual", se lee en reportaje "Las mujeres con adicciones sí existimos: soy madre, hija, amiga y compañera".

Esta investigación se divide en dos partes, la primera titulada "¿Por qué en México no se habla de adicciones en las mujeres?", en la que explica que la falta de estudios y un enfoque con perspectiva de género dificulta que se le brinde atención a las mujeres con adicciones y tardan más años en dejarlas atrás que los hombres. La segunda parte se centra en las historias de vida de algunas mujeres con adicciones.

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2. Inclusión efectiva en el Pride

En nuestra investigación "Inclusión efectiva en el Pride: propuestas para celebrar sin discriminación" platicamos con distintos grupos que forman parte de la comunidad LGBTQ+ y esperaban que este año la marcha fuera diferente, que les perteneciera a ellos, ellas y elles y no a las marcas. Por eso se organizaron para lograrlo.

La marcha de 2022 fue una de las más concurridas, en gran parte debido a esto los asistentes del colectivo Movimiento de Personas con Discapacidad se enfrentaron a violencia capacitista. El activista y conferencista, Guz Guevara, nos comentó que en medio de la marcha los mismos asistentes comenzaron a gritarles cosas como "ustedes ¿qué hacen aquí?" o "sálganse".

"Empezaron a gritar 'ustedes ¿qué hacen aquí?', a hacer comentarios de burla, como una desacreditación y forma de quitarnos valía, reducirnos a que no deberíamos estar ahí como si fuéramos ajenos a ser seres sexuados, a ser parte de las personas LGBT+. Eso fue muy triste, muy impactante", comparte Guz Guevara en entrevista con La Cadera de Eva.

Es por ello que en la marcha de 2023 el colectivo pidió que se considere a las personas con discapacidad y sus necesidades para poder salir a ejercer su derecho a la protesta. 

Este año también se creó el Bloque Disidente con el objetivo de participar en una marcha distinta, más politizada, en contra de la mercantilización de la protesta, los automotores, el gobierno y los políticos que están metidos en la organización, para demostrar el descontento en contra de estos sectores, pues consideran que utilizan esta manifestación como una estrategia de pinkwashing y fines lucrativos.

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Foto: Cuartoscuro

3. Entre comer o comprar toallas, así es menstruar en situación de calle

En esta investigación pudimos conocer la historia de Lupita, una de las mujeres en situación de calle que acude con organización Lleca, la cual les da ropa, zapatos y productos de gestión menstrual. A través del relato de Lupita, Osiris y Sandra visibilizamos que las mujeres y personas menstruantes en situación de calle se enfrentan a la falta de productos de higiene menstrual, la discriminación y la violencia sexual mientras viven su menstruación.

“Es incómodo porque la gente te ve así y te hace sentir mal, hasta dices ‘chale ¿pa' qué fui mujer?’, te decepcionas de ti”, nos contó Lupita para el reportaje "Entre comer o comprar toallas, así es menstruar en situación de calle".

"En la Ciudad de México se estima que 6 mil 754 personas viven en situación de calle, de ellas el 87% son hombres y el 12.73% mujeres, de acuerdo con el Diagnóstico Situacional de las Poblaciones Callejeras 2017-2018, realizado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos y El Caracol, asociación para la visibilidad e inclusión social de las poblaciones callejeras", se lee en la investigación.

El Caracol nos explicó que la mayoría de las mujeres y personas menstruantes en situación de calle no tiene el recurso económico para vivir una menstruación digna porque se debaten entre si comprar cosas de alimentación o insumos de gestión menstrual. 

El 54% de las mujeres han tenido que renunciar a comprar otros productos básicos como alimentos, medicamentos o servicios, para poder comprar toallas desechables, de acuerdo con la ‘Primera Encuesta Nacional de Gestión Menstrual’, realizada en 2022 por Menstruación Digna México, Essity y Unicef.

Gracias a esta investigación obtuvimos el primer lugar en el Concurso Nacional de Periodismo “Hablemos de menstruación y menopausia 2023”.

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4. Acoso e intento de secuestro: violencias que viven repartidoras de comida

"Al entrar a un departamento a entregar un pedido no sabemos si saldremos", estas son algunas de las violencias a las que se enfrentan las repartidoras de comida. Esto es una realidad que viven las mujeres que trabajan en el servicio de delivery (entregas a domicilio), el 36% de las mujeres señalaron haber sido acosadas mientras realizaban su quehacer como repartidoras, de acuerdo con el Instituto de Estudios sobre Desigualdad (INDESIG).

La inseguridad que viven las mujeres en México ha provocado que las repartidoras vivan desigualdad de condiciones en el trabajo. De acuerdo con el estudio realizado por el Colegio de México "mientras las mujeres tienen accidentes o robos menos frecuentemente que los hombres, tienen una tasa más alta de incidencia de acoso sexual y reportan un número promedio más alto de estos incidentes" con 4.5 casos frente a  3 de los hombres.

Debido a este panorama de inseguridad y violencia generaron estrategias de cuidado como la creación de un mapa en el que han registrado las direcciones en las que han vivido incidentes como acoso sexual, asalto, fraudes e intento de asaltos.  En este mapa se puede leer que las repartidoras se han encontrado con casos como "cliente salió masturbándose cuando el primer repartidor fue a entregar pedido. Cliente sale desnudo cuando el segundo repartidor fue a entregar pedido" o "recibí mensajes de acoso de parte del cliente pidiendo que me dejara tocar mis partes intimas".

"Entre las situaciones que más se repiten en este mapa es que los clientes salen desnudos o semidesnudos a recibir los pedidos, hacen comentarios lascivos, han llegado a tocar a los y las repartidoras sin su consentimiento e incluso son insistentes para que sean mujeres quienes lleven el pedido", revelamos en nuestra investigación.

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5. ¿Quién fue La Narcosatánica? La historia de revictimización de Sara Aldrete

"Corría el año de 1989 cuando la prensa mexicana alertaba a la población; algo macabro, terrible y sanguinario había pasado. Un grupo delictivo relacionado al cartel del golfo realizaba sacrificios humanos y una fosa de 13 cuerpos había sido encontrada, ¿lo peor? Una mujer había participado en estos hechos, siendo la única sobreviviente del clan a quien la prensa amarillista apodaría “La Narcosatánica”, una figura que fue revictimizada, torturada y sometida a un proceso mediático violento. A 31 años de su aprehensión, ¿su sentencia representó justicia?", así iniciamos nuestra investigación.

En esta investigación te contamos la historia de Sara Aldrete, quien vivió revictimización, violencia simbólica, fue atacada por los medios de comunicación y es un ejemplo de que las sentencias son recrudecidas cuando quien comete un crimen es una mujer.

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Sara Aldrete se le relaciona con un grupo criminal llamado Los Narcosatánicos, cuando fue detenida se le apodó  ‘La Madrina’ o ‘La Narcosatánica’ por los medios de comunicación, se le acusa del asesinato de por lo menos 13 personas y asociación delictuosa. Se especuló que este grupo criminal realizaba rituales satánicos, sin embargo, de todos los involucrados como el líder Constanzo “El padrino”, ella fue la única detenida y se le dio una sentencia de más de 600 años. 

En esta investigación hablamos acerca de la violencia de la que fue víctima Sara Aldrete, sin justificar su papel en toda esta historia, pero sí cuestionamos y ponemos sobre la mesa un tema fundamental: la justicia es selectiva y mucho más dura con las mujeres que se salen de los estereotipos y "buenas formas" que con los hombres.